Terror en la ópera y La mujer del lago, novedades de Cinema Giallo
Deja un comentariooctubre 20, 2015 por Roberto García-Ochoa Peces
Regia Films continúa su encomiable recuperación del gialli mediante el lanzamiento de dos nuevas referencias dentro de su colección Cinema Giallo: la popular Terror en la ópera, con la que el maestro Dario Argento acometería su segunda etapa en el subgénero (acaso la menos estimulante y más formularia en su recorrido, pero no por ello carente de interés) y la menos conocida pero soberbia La mujer del lago, un temprano giallo, modesto y sin embargo extraordinariamente refinado, dirigido a dos manos por Luigi Bazzoni y Franco Rossellini.
Terror en la ópera (Opera; Dario Argento, 1987)
Dario Argento retoma de nuevo el género con Opera tras la aventura sobrenatural en que incurrió con Phenomena. Presenta una cinta ambientada en un gran teatro donde a una joven se le presenta la gran oportunidad de hacer su debut en la ópera Macbeth, de Giuseppe Verdi, en lo que es otra demostración del interés del director por la visión artística en general y por el arte escénico en particular. Y hace extensiva la tragedia contextual a su armazón narrativo -entre otros guiños metalingüísticos, como aquel en el que el público de la ópera reacciona recibiéndola con malas críticas, instando a su director a que regrese a la realización de cine, su medio natural-, por otra parte debilitado debido a una construcción más preocupada en alcanzar la siguiente secuencia de asesinato que en hilar y dotar de peso dramático a una historia trágica como la que aquí subyace. No obstante, el realizador romano vuelve a demostrar su poderoso nervio en cuanto a la planificación e inventiva visual residente en estos instantes de acción desaforada -entrega la icónica imagen de los alfileres debajo de los ojos de la protagonista-, además de recoger cierto virtuosismo con la cámara, despuntado en Tenebre, para airear sospechas de parte de los otros grandes protagonistas del relato, los cuervos: manifestación de la podredumbre e incomodidad que atañe al mismo.
El DVD respeta el formato original de pantalla 2.35:1 e incorpora mejora anamórfica para televisores de pantalla ancha. Incorpora hasta tres pistas de audio: italiano, inglés y castellano, y presenta sendas pistas de subtitulado específico para los dos primeros. Se trata del montaje internacional uncut, por lo que en caso de verse en español saltarán automáticamente los subtítulos para aquellas escenas que fueron censuradas en nuestro país.
La mujer del lago (La donna del lago; Luigi Bazzoni, Franco Rossellini, 1965)
Elegante filme del entonces debutante Luigi Bazzoni (ayudado en la dirección por el asistente Franco Rossellini, quien realiza una exquisita labor de cámara en la filmación y retrato de los enclaves donde se desarrolla la historia), que posteriormente visitaría el género de manera asidua (y genial: véase El día negro o Huellas de pisada en la luna) en su escaso recorrido artístico. De no ser por su macguffin narrativo y ciertas visualizaciones de cariz más o menos explícito hacia el final -dentro de los márgenes de la comesura que preside el minutaje-, una vez resuelto el enrarecido ambiente con que se encuentra el escritor protagonista en el retorno a su plácido lugar de vacaciones y que le impele a investigar por su propia cuenta, La donna del lago podría encuadrarse perfectamente como thriller de suspense al más puro estilo Hitchcock. Un director del que, sin duda, Bazzoni se siente deudor tanto en la forma -ahí están ese blanco y negro límpido e inundado de clase pero ocultador de la verdad más sucia e inconfesable, o los crispantes chirridos de la genial banda sonora, compuesta por Renzo Rossellini, padre del codirector Franco y hermano del famoso Roberto- como en el contenido, que apunta a la retorcida pulsión criminal inherente a la naturaleza humana toda vez se superponen los líos amorosos, el celo personal y el ánimo de venganza. Inteligentemente suave si bien incisiva en su recorrido, y desoladora en su conclusión, esta cinta supone una gema de gustosa contemplación y demuestra la (extraña, por precoz) calidad de un talento en ciernes.
La edición es correcta en cuanto a su formato de pantalla (1.85:1 anamórfico) y contiene la pista en versión original en italiano (con subtítulos en castellano) así como la del doblaje en español. Una presentación sencilla pero efectiva, que consigue fidelizar la excelsa belleza fotográfica de la película en blanco y negro.